ACTITUD Y POSITIVISMO
En el cine del director británico hay una clara actitud
política que se repite una y otra vez manifestando su inconformismo haciéndose eco y voz de todos aquellos que
proliferan por los suburbios de la
sociedad cuya situación manifiesta claramente es la marginalidad de todos los que no gozan de una comodidad
social.
Esta nueva película se concentra en un punto de vista muy
particular, el cual es el de una adolescente de aproximadamente 18 años, emigrada
de la Europa del Este y que repentinamente va a parar a un rincón de Inglaterra en la costa del noroeste.
La sensibilidad del director británico transforma al personaje principal en una
emigrante de Europa del Este, un ser joven y querible, que lejos de sus padres, busca
encontrar su camino a través de la honestidad.
La debutante Ebla Mari encarna a Yara, robándose la
película de punta a punta en base a su expresiva sensibilidad. Ella hace sentir
al espectador no solo la soledad del emigrante sino también la necesidad de
conocer gente y abrirse hacia los demás en busca de una empatía que le permita
la sociabilización que aspira para poder insertarse en un medio social
diferente al que ha nacido y vivido.
Loach desarrolla su obra
desde el ostracismo que genera la soledad del recién llegado. Yara no conoce a
nadie y desde esa soledad trata de construir pequeños lazos de relación con los
cuales aspira a integrarse en una nueva sociedad que es absolutamente diferente respecto donde ella ha nacido.
El director inglés maneja el material con absoluta idoneidad para
construir una película sensible donde el espectador rápidamente toma parte de
la situación del personaje y comparte ese devenir que necesita para facilitar su integración social.
El cine de Loach siempre se ha nutrido de la
realidad. Su característica principal es el verismo, y una vez más sale adelante con sus consignas, en este caso, la convicción
del que persevera y triunfarás. Yara es un
ser apocado. No conoce el inglés como idioma, no tiene demasiado dinero
disponible, está sola. Ha llegado a un puerto donde no conoce a nadie. Pero su
actitud es siempre positiva y en consecuencia, encuentra pequeñas soluciones que le permiten dar un
pequeño paso adelante en su situación de marginalidad.
La película nos hace reflexionar sobre la necesidad de
vencer la adversidad. El personaje tiene siempre una actitud positiva, lo cual la
transforma en un elemento de superación personal. Por otra parte, el pueblo,
que alguna vez lucio la bonanza de la extracción de las minas de carbón de la
zona, ahora está tan venido a menos como la misma situación de los inmigrantes.
En el fondo de la cuestión, uno y otros están en una encrucijada de la cual no
tiene otra que unirse y tratar de salir adelante.
La película es lenta y en blanco y negro, pero está muy bien escrita, mejor llevada a la pantalla y sobre todo, extraordinariamente actuada. No tengo mucho más que decir. Vaya al cine y disfrútela. No hay mejor opción que la de manos a la obra. Los personajes de esta película adhieren a ese dogma. Para bien del film, es una película que no solo deja verse, sino también deja la dulzura del que ha llegado a algo bueno.