sábado, 30 de marzo de 2024

RECUERDOS DE PARIS de Alice Winocour

TERRORISMO, DEMENCIA Y REHABILITACIÓN: 

Producto de una casualidad, la protagonista del film, resulta víctima de un ataque terrorista en una cafetería en pleno centro de Paris, el cual la desestabiliza emocionalmente, provocándole pérdidas de memoria que la bloquean y le impiden recordar parcialmente sucesos de su vida cotidiana. Ella necesitará ayuda para rehabilitar su vida.

El film se convierte en un viaje hacia el horror. Lo sucedido le causa una conmoción cerebral que la trastorna y desestabiliza, generándole no solo dolor, sino también confusión, desorientación y alejamiento hacia los demás seres que la rodean.

 

La película  es muy interesante. El atentado marca en ella un antes y un después, dejando incluso de lado aspectos políticos, concentrándose en su rehabilitación. La trama se focaliza en esa víctima, un ser humano trastornado tras lo sufrido.

 

En consecuencia, el centro de atención se monopolizado en Mía, la protagonista central del relato. El film deja de lado el género, o sea, el policial, incluso el suspenso, para acompañar a la mujer dañada en su proceso de recuperación total, ya sea físico como psicológico.

 

El atentado la ha dejado sin memoria, en consecuencia, sufre una gran soledad. Ella no recuerda ni marido ni hijos. No recuerda a nadie.  Con el correr de los días, y el apoyo de todos aquellos que la rodean, comienza a rearmar su vida a través de pequeños flashes de memoria y recuerdos, un recorrido necesario para su reconstrucción como persona.

 

El atentado sucede en una calle de Paris. No es un film policial ni mucho menos ideológico. Estamos en una obra personal que analiza la autoestima personal, acentuando la enorme capacidad de reconstrucción que tiene el ser humano ante la adversidad de su suerte.

 

La protagonista es una víctima por haber estado en forma casual en el lugar y el momento equivocado. Ha sido atrozmente atacada, pierde la memoria, el contacto con la realidad, la relación con su marido y sus hijos, hasta que logra equilibrar su vida y comenzar a desarrollar una nueva vida en base a su propia paciencia, volviendo a adquirir su mundo familiar, comenzando de a poco a recordar, reconociendo sus seres queridos, y reinstalándose en una sociedad que se transforma en ajena para ella, donde necesita ayuda no solo de su familia sino también de vecinos y amigos que puedan  tapar aquellos agujeros de memoria que el colapso le ha generado.

 

Más que interesante, este film francés es un nuevo exponente de un cine francés que esta volviendo a despegar con fuerza con obras no solo bien hechas sino también interesante para una platea amplia.


lunes, 25 de marzo de 2024

NO ESPERES DEMASIADO DEL FIN DEL MUNDO de Radu Jude

Y ES TAL CUAL LO PERCIBMOS…

Con una experiencia de más de 20 años de actividad a través de cortometrajes, documentales y algún otro largo no estrenado en Argentina, llega este representante cabal del nuevo cine europeo, más precisamente rumano, con un film absolutamente personal en lo formal. Amante de la cámara fija, en el round final de una película de casi tres horas se da el gusto de narrar con ella una escena de aproximadamente 40  minutos de duración.

No hay dudas que Jude tiene muy en claro el tipo de cine que busca realizar. Es hijo del cine del Este y como tal, privilegia la imagen sobre el discurso. En consecuencia, su film es absolutamente personal, y sus formas narrativas son directas y concisas. De hecho, la escena aludida nos deja tan desconcertados con su ritmo como su capacidad de darnos una mirada cinematográfica pura tratando de generar un fresco sobre una época que sin lugar a dudas no quedara escrita en la historia de la humanidad.

Jude prende todas las señales de alerta que puede desde su cine para que nos demos cuenta que estamos viviendo mal y que posiblemente, esta decadencia que deja ver desde su Rumania natal, más precisamente su capital, Bucarest sea global.

El film nos habla a través de una mujer taxista en la era Ceaușescu, mostrando la realidad de una mujer llamada Angela (Ilinca Manolache), que trabaja como asistente de producción de una compañía de cine que se pasa el día andando en auto haciendo castings y realizando trámites.

Desde su inicio hasta el final,  se sostiene vagabundeando por las calles, metiéndose en todos lados, logrando no solo filmar sino captar con un estado de cosas que no dan otra visión que la desesperación social que genera  una falta absoluta de porvenir.

No se trata de un film para disfrutar aunque su riqueza narrativa, su fluidez y sobre todo la claridad de su mensaje nos deja pensando y reflexionado sobre lo que estamos viendo. Refleja un estado de situación preocupante porque el film, si bien tiene un andamiaje convencional de comienzo, desarrollo y final,  transcurre básicamente en la calle, y su carácter es documentalista.

Inspirado en el neorrealismo italiano de pos guerra ( nos hace recordar, salvando las distancias), a films como,  Roma, Ciudad Abierta (Roberto Rossellini, 1945), Limpiabotas (Vittorio De Sica, 1946), La Tierra Tiembla (Luchino Visconti, 1948), Ladrón de Bicicletas (Vittorio De Sica, 1948) , y tantas 

miércoles, 20 de marzo de 2024

HABANOS (Der Trafikant), 2019) de Nikolaus Leytner

 EL HUEVO DE LA SERPIENTE

La acción transcurre en Viena en 1937. La unión de Austria con la Alemania nazi es una realidad. En medio de esos acontecimientos, un joven adolescente de 17 años comienza a trabajar en un comercio como vendedor de tabaco, donde, más tarde, uno de sus clientes será el famoso psicoanalista Sigmund Freud.

Basada en un libro de Robert Seethaler, relata la historia de una relación entre un adolescente y un hombre mayor al que se lo respeta como un abuelo. Ese hombre, es el famoso psicoanalista Sigmund Freud. En ese escenario, día a día, el movimiento nazi comienza a crecer en la ciudad. El humor de la gente se percibe nervioso, y se siente espontáneamente.

Protagonizada por Simon Morzé y Bruno Ganz, en los papeles principales, la película es contundente, pareja y concisa. Si bien no destaca desde un punto estilístico, narra con destreza y claridad una historia de crecimiento personal en medio de una guerra dejando satisfecho al espectador que después de hora y media de un buen espectáculo, permite concluir sobre la situación social del país, el cual  ha comenzado a deteriorarse como consecuencia del advenimiento de una tiranía  que sin lugar a duda sumerge a Alemania en una de las mayores pesadillas de su historia, generando una guerra de características mundiales totalmente innecesaria que dejaría duras secuelas para su recuperación.

La película es sólida en todas sus líneas, recreando excelentemente el ambiente pre bélico en el cual sus jóvenes e idealistas personajes no piensan ni remotamente la pesadilla que años después los encontraría como principales actores de una realidad que posiblemente nunca hubieran sospechado.

EL ULTIMO VEERMER de Dan Friedkin


EL ARTE, EL CINE Y LA VERDAD

Terminada la 2da Guerra Mundial, un soldado llamado Joseph Piller investiga a un reconocido artista holandés, acusado de conspirar a favor de los nazis. A pesar de las evidencias, Piller se va convenciendo de la inocencia del pintor, intentando salvarle su vida.

El veermer del título original de la película alude a un pájaro australiano que imita los llamados de otras especies, lo cual remite a una historia sobre la falsificación del arte, en concreto, un cuadro del mencionado pintor.

El hecho sucederá después de terminada la Segunda Guerra Mundial, durante etapa de masificación de la población, lo cual suele llevar a una mayor  corrupción, con la consecuente pérdida de los valores sociales. Dentro de ese marco decadente y cada vez más corrupto, un marchante de arte holandés es acusado de vender al mariscal nazi Hermann Göring un cuadro de incalculable valor histórico después de ser arrestado y juzgado por colaboración con el enemigo.

La cuestión es que Van Meegeren, pintor y retratista neerlandes,  considerado como uno de los más ingeniosos falsificadores de arte del siglo xx, montando una defensa poco convencional, ha afirmado que “La Cena de Emaus”, obra de arte en cuestión, no era en realidad una obra maestra de Johannes Vermeer sino una falsificación, pintada nada menos que por él mismo.

Guy Pearce interpreta al artista estafador que sobrevivió a la guerra vendiendo imitaciones a los nazis en un film de características clásicas que recrea la época de la posguerra, cuyo tema invoca al arte pero sobre todo a la artimaña del engaño. El film luce con corrección y atrapa no solo por sistemática sino también por la destreza narrativa que si bien no innova, tiene la virtud de relatar con fluidez una historia presumiblemente real que no solo logra interesar sino también entretener al espectador.

La última parte del film se concentra en el juicio legal. La  historia que, alguna vez fue notoria y ahora casi olvidada, fácilmente captura y mantiene nuestro interés. Por otra parte, la dirección sencilla de Friedkin expone siempre con claridad.

El guion supone que Van Meegeren estafó a Göring por dinero. La historia  afirmó haber cambiado el Vermeer falso por más de 100 pinturas holandesas que Göring había confiscado. Guion y verdad histórica no concuerdan. El cine siempre es cine.

sábado, 9 de marzo de 2024

TODOS SOMOS EXTRAÑOS de Andrew Haigh

 PURO SENTIMIENTO

Interpretada por dos excelentes actores ingleses, Andrew Scott y Paul Mescal en los roles principales de  Adam y Harry, respectivamente, se destaca el estreno de esta semana cuyo tema central son los sentimientos, particularmente los de padres e hijos, haciendo foco en los de culpa y de expiación.

Ambos personajes son vecinos de un mismo edificio de departamentos cercano al centro de Londres. Son jóvenes, han pasado los 25 años y se conocen en un viaje en ascensor. Con el correr del tiempo, los mencionados vecinos se enamoran uno del otro, pero en el caso de Andrew, su homosexualidad se manifiesta de manera más abierta con esos sentimientos.

En los dos personajes hay una apertura, más pronunciada en Adam que en su amante. Es un sentimiento de falta que lo preocupa y  lo lleva a  recordar el pasado, sobre todo al de  sus respectivos padres, en particular su madre, y a la ciudad suburbana donde ellos vivían y donde él vivió su infancia, lo cual recuerda tal como estaban el día de su muerte, 30 años antes.

Adam es también un adolescente tardío que todavía extraña a sus padres, a quienes evoca continuamente en las decisiones que toma. Es un hombre en soledad que nunca ha abandonado la adolescencia y vive extrañándolos. Ahora está tomando una decisión y en consecuencia, los necesita. Necesita ese apoyo. Le falta confianza en si mismo.

Se trata de un film sobre los sentimientos, cerrado, asfixiante, donde el protagonista nunca termina de cortar el cordón umbilical, especialmente con su madre, más que con su padre. Su personaje transmite angustia y soledad. Parece siempre un joven que debe pedir permiso a sus padres para hacer lo que debe hacer. Evoca la reflexión, incluso la disciplina, y también el amor por sus padres, la casa de su niñez, lo que representa una especie de espacio de duelo inacabado, de lo cual rescata los besos, como una forma ancestral de demostrar el cariño que en la vertiginosidad que vivimos parece ser olvidada.

Sin duda, es una de las mejores películas vistas este año. Transmite con elementos muy cinematográficos, llámese actuación, acompañamiento musical y sobre todo, la fotografía magistral  de Jamie D. Ransay que muestra una Londres típica siempre grisácea y húmeda,  que da justo con la ambientación que requiere una historia sobre alguien que necesita conectarse con el pasado como para pedir permiso sobre lo que está haciendo en el presente.

En síntesis, es una película que evoca el amor por la familia, y profundiza sobre los traumas que se arrastran desde la adolescencia, la necesidad de perdonar, y las secuelas que perduran y molestan más tarde, incluso en la adultez. Los rubros técnicos, particularmente la fotografía de Jamie D. Ramsay y la edición de Jonathan Alberts son también excelentes y coadyuvan a constituir esta obra en una de las mejores películas vistas este año.

 

PD. La obra podría rápidamente transformarse en obra teatral.